ESCARAMUZA EN NUEVA YORK

Hemos querido traer este tema a nuestro blog porque, a pesar de haberse leído por otros lugares, nos gustaría debatirlo un poco en el banquito de nuestro «parque» virtual.
Lo teníamos programado desde hace varios días, pero dado el interés que despertaron los dos temas que hemos debatido últimamente, decidimos darle un poco de largo.

Ha estado de visita por Nueva York, en pleno corazón del imperio, nada más y nada menos que el camarada Miguel Barnet, todo un personaje dentro de la dictadura; todo un representante de la intelectualidad “revolucionaria“ en el archipiélago de la felicidad castrista.
No hemos leído mucho sobre su paso por esta área, pero con un par de noticias por aquí y por allá se ha logrado conocer que al parecer no le fue tan bien como él pensaba, al menos en cuanto a las expectativas de ganancia ideológica para la causa que dice defender, aunque seguramente no habrá dejado de llenar sus maletas de pacotilla capitalista, tan “odiada” por estos personeros del gobierno cubano.

Según describe Alexis Romay, luego de haber tenido la oportunidad de asistir a la presentación del intelectual en el Bildner Center del Graduate Center of City University of New York, los organizadores intentaron desalentar a algunos de los interesados en asistir al evento con el pretexto de que no había mas capacidad en el local, lo que hizo que algunos que obviamente podrían representar alguna que otra «molestia», para los planes del personaje castrista y sus adulones de turno, desistieran de presentarse en el lugar; pero incluso a Geandy Pavón, que decidió hacerlo de todos modos, y a pesar de que habían asientos disponibles, no le permitieron entrar al recinto de inmediato y lo hicieron esperar sin razón alguna, solo permitiéndole la entrada una vez que el personero ya había comenzado su disertación. A mí, como mal pensado que soy, se me ocurre que quizás estarían temerosos de que les proyectara la cara de Zapata Tamayo en el escenario, como hizo en la fachada del Carnegie Hall en la ocasión de la presentación de Silvio Rodríguez.

Cuenta Romay que después del acostumbrado teque, donde el camarada divagó sobre todo lo que le dio la gana, llegó la hora que todos estaban esperando, la de las preguntas en vivo y en directo, aunque como casi siempre sucede en muchos de estos casos, el moderador intento monopolizar el intercambio haciendo preguntas cómodas que el escritor no tuvo problemas en contestar fácilmente, pero cuando algunos de los presentes notaron que ya quedaba poco tiempo comenzaron a levantar las manos con insistencia para poder lanzar sus preguntas, que esta vez no serían tan fáciles para el visitante. Por supuesto que no faltó el comentario del “moderador” pidiendo que no se hicieran preguntas de política; y aquí caemos de nuevo en la demagogia de los funcionarios del sistema cubano y sus acólitos del exilio, porque al parecer, a uno de los personajes encargados de dirigir precisamente la política cultural de la isla, no le gustaría que se le preguntara sobre la política que precisamente aplican, siguiendo los lineamientos gubernamentales, siempre bajo el ojo avizor de “quientusabes”.

Todo el que haya visto el video de las preguntas de Alexis y Guendy podrá sacar sus propias conclusiones sobre la naturaleza repulsiva de este gendarme de la dictadura, que se quedó sin palabras para ofrecer respuestas coherentes con su propia actitud. Se vuelve a cumplir la divisa de que del dicho al hecho hay un gran trecho, y Barnet nos ayuda a corroborarla con su intento de justificar su propia participación en hechos bochornosos para cualquier escritor o ciudadano común que se respete. Independientemente de la calidad literaria de algunas obras de Barnet, que algunos alaban y otros ven con indiferencia, los hechos son quienes se encargan de demostrar la verdadera valía de un ser humano, y parece ser que con respecto a eso, el compañero Barnet no logra calificaciones ni siquiera aceptables. Hay cobardes y «cobardes», y pienso que cuando usted ha sido cómplice en algunas de las traquimañas de la dictadura, lo menos que podría hacer es reconocerlo abiertamente y afrontar las consecuencias como un hombre; pero va y es aquí, precisamente, donde yo estoy pidiendo mucho de este señor.
Dicen que salió del salón con las orejas muy coloradas y molesto por el emplazamiento a que fue sometido, aunque digo yo, va y quizás hasta pensando que obtuvo una “victoria” ideológica más frente al enemigo, mientras que para quienes han comentado el video y algunos que estuvieron presentes, solo ha sido un papelazo más, de esos a los que ya nos tienen acostumbrados estos personajes, cuando sus interlocutores no están atados de pies y manos por la maquinaria represiva que el mismo señor Barnet defiende a capa y espada.

Aquí les dejo el link del video subido a youtube por Armando López, quien aun intentando ser bondadoso en su exposición, cataloga al esbirro como otra víctima de la propia dictadura, pero yo solo lo puedo calificar como otro HP más de los tantos que viven a costa de defender la ignominia que comete el régimen castrista.
Me gustaría saber ¿qué piensan ustedes?

Nota: En la segunda parte del mismo video, Armando hace un pequeño homenaje a la fallecida María de los Angeles Santana.

Reinaldo

New Jersey