Es triste ver y extremadamente duro aceptar como nuestra Cuba se ha quedado ahí, envejeciendo, caducando, deteriorándose. Hay tanto que se ha quedado obsoleto y anticuado, tantas cosas que un día prometieron ser maravillosas hoy son cadenas que nos atan impidiéndonos avanzar, y esos kilómetros que no hemos podido recorrer, son ya incontables. Pero lo que más me acongoja y aflige es todo lo que hemos perdido, principios, valores, calidad profesional, aspiraciones, orgullo propio………. Perdimos tantas cosas atados a esas cadenas, que de alguna forma nuestros deseos de liberarnos se rindieron, y con el desánimo y la pérdida de fuerzas se terminaron extinguiendo todas esas cualidades que antes nos identificaban y que desafortunadamente ya no tenemos.
Nuestra Isla, nuestra nación, nuestra tierra, ese lugar que nos pertenece, donde viven nuestros recuerdos, donde está nuestra infancia, el principio de nuestras vidas, ahora está gris, está opaca, está empañada, está pálida y marchita, está seca y áspera como campos abandonados, sin riego, sin abono, sin cuidados y sin pastor que mime su tierra, que con entrega y deseos de recoger una nueva cosecha la mantenga fértil y saludable durante cada día.
Ay mi tierra linda y añorada, qué te hicieron, qué te hicimos, qué nos pasó, como me gustaría verte otra vez sonreír. Las interrogantes son:
¿Te hemos abandonado en manos de tus verdugos y hemos huido cuando debimos permanecer?
¿Podrás recuperarte o estás tan transformada y debilitada que prefieres permanecer en tu atadura?
Anónimo.
Tomar la Palabra 
Me llegó de forma anónima este post.
Hablando de añoranzas, yo siempre pienso en ciertos lugares de mi barrio, en ciertas personas de mi infancia y juventud, y en ciertos pasajes de mi vida. Eso es inevitable aun si estuviera en Cuba, imagínense fuera de Cuba. Es normal.
Pero bueno, yo pienso igual que García Márquez cuando dijo que:
«El secreto de una buena vejez no es otra cosa que un pacto honrado con la soledad».
Me gustaría saber la edad del autor o autora de este nuevo post. En él se dice:
«Nuestra Isla, nuestra nación, nuestra tierra, ese lugar que nos pertenece, donde viven nuestros recuerdos, donde está nuestra infancia, el principio de nuestras vidas, ahora está gris, está opaca, está empañada, está pálida y marchita, está seca y áspera como campos abandonados,…….»
Imagino que esos recuerdos, esa infancia y ese principio de vida esté referido a un período posterior a 1959. A menos que el autor sea más viejo que yo. Téngase en cuenta que ese gris y opaco de la isla lleva más de 60 años.
Si el autor es una persona que siente nostalgias por sus años de niño o joven, entonces le diré que esa añoranza la siente la gente de su edad de todos los países del mundo, a todos les pasa, no sólo a aquellos que han vivido en una dictadura comunista.
Dice también el autor (a): «Pero lo que más me acongoja y aflige es todo lo que hemos perdido, principios, valores, calidad profesional, aspiraciones, orgullo propio………. »
Yo no, yo además de los que tenía, he ido sumando muchos más durante el curso de mi vida.
,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,
Jejejeje, ¡Como está el deprimido ultimamente!!!!. Pastillitas por favor, para tanto cubano triste!!!!!.
Estoy seguro que estos cubanos melancólicos de hoy son los mismos que reían ilusionados hace unos años cuando Pánfilo dijo en medio de una borrachera que quería jama.
Lo mejor del escrito de este Anónimo son sus dos preguntas finales. jejeje, para mi que el autor es tremendo jodedor, jejeje. ¡Que preguntas hace!!!. Yo le responderé en nombre de la Patria:
1,- ¿Te hemos abandonado en manos de tus verdugos y hemos huido cuando debimos permanecer?
No cabronazo, son pasteles.
2,- ¿Podrás recuperarte o estás tan transformada y debilitada que prefieres permanecer en tu atadura?
Ná, prefiero permanecer en mi atadura, ……. gilipollas!!!!!!.